A mis versos

Dicen,
que no sois míos
ni yo, soy vuestra.
Quizás tengan razón
y seáis flores blancas
que nacen secas,
o nacen tímidas
y solo esperan ser
como los segundos
que el pulso quiebra.
Dicen,
que no sois míos
ni yo, soy vuestra, pero…
¿Quién ve tras de mis ojos
a las estrellas?

A Rosalía

Mujer
contigo soy
además de mí
y sobre mi cara
salada humedad
intemporal
del mar
que sin naufragio
me invita a ser
sirena

Agua

Agua, agua…
el arroyo no llora
sino canta.
Llanto y música
brotan,
chocan, estallan.
Agua, agua…
¿quién sabe del fuego,
de la fragua,
del aire en las marismas
que olvida la sal blanca?
…Y se eleva a la altura,
…y nos deja.
Agua, agua…
el arroyo no llora
sino canta.

Allí

Allí,
donde las hadas,
y las aguas del sueño
transparentes,
donde los recuerdos se desatan,
donde los puntos suspensivos y las comas
y los silencios plenos
se someten.
Allí,
donde un momento vagué sola y me sentí,
donde las sombras
toman formas prohibidas
por la mente.
Allí,
de allí
donde las dudas giran sobre si mismas
y nos vuelven.

Ante mí

Ante mí, siempre una opción
cualquier cosa puede salir
de la chistera,
basta un segundo, una palabra
premonitora, sin mi…
…y después, empieza todo, conmigo.
Pero la palabra fue primero.
Yo voy detrás, paseando
por las opciones, con las manos
en los bolsillos,
que nunca están vacíos.
Vivo así, entrelazando azares
respetando las señales de tráfico
y no creyendo demasiado
en las respuestas, que se me dan
o que me doy.
La vida es una maravillosa
Improvisación, porque la necesitamos.
Impulso, latido sin el tic tac de los relojes…
No hay tiempo.

Cuando leo mis versos

Cuando leo mis versos
intentos de encontrarme
como un puzzle, incompleto…
Cuando pesa la tarde
como un fardo de piedras,
que en torno a mí se esparcen…
Cuando, críticamente
no hay espejos amables,
cuando duele la risa
y cuando el llanto es sangre…
Entonces algo intenta dentro de mí elevarse
y un humo blanco exhala esperanza,
pues arde la víctima del tiempo
Ave Fénix, triunfante.

Color

Ante mí un hondo azul,
el mar
corona de laurel
la heroica travesía.
Estoy ante la playa
de los sueños exhaustos
dime ¿qué haces tú ahí?
¿Me esperas, me acompañas?
¿Acaso eres el cielo
que mi pecho refleja?
¿Eres sed o eres agua?

rincón escrito

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